El
sexteto de los Estados Unidos se encontró con una Cuba que mostró destellos de
su pasado de gloria, a la que superó en cinco sets para apropiarse del liderato
del Grupo B de la XV Copa Panamericana de Voleibol Femenino Santo Domingo 2016.
El resultado
por 19-25, 25-20, 18-25, 25-15 y 15-7 muestra cómo Cuba (2-1) batalló y luego
fue cedió ante el influjo en todo el partido de una poderosa frontal formado
por las centrales Rhamat Alhassan (15 puntos) y Carly Wopat (8), la opuesto
Alexandra Holston (16, mejor anotadora) y la capitana y salidoras Megan
Courtney y su colega Madison Kingdon (15), pero sobretodo, por la potencia del
casi inexpugnable saque saltado de la acomodadora Micha Hancock (11 puntos).
Heiry López
Rodríguez sacó la cara entre las caribeñas con 17, Caridad Matienzo 15, Regla
Gracia 11, Heiry Casanova y Daimara Lescay seis.
Estados Unidos
suma su tercer triunfo y se apodera del liderato del “B”, proyectado a ganarlo
invicto.
El tercer set
tuvo ribetes del pasado inmenso cubano, pero, ante un Estados Unidos que no es
su equipo que va a los Juegos Olímpicos. Este salió arriba 7-0 por el saque de
la zurda Hancock y su poderosa frontal. Las “Morenas del Caribe” comenzaron la
reacción con el saque flotado de López Rodríguez para ganar los primeros tres
puntos y se enzarzaron con las norteñas apelando a una gran defensa aérea y en
el piso.
Siguieron con
una andanada de ataques y bloqueos cohesionados entre López, la potente de
Matienzo por el centro, Heidy Casanova y Yamila Hernández, que desestabilizaron
la defensa norteña y les permitieron rebasar y llegar arriba al segundo tiempo
técnico por 16-14.
La derrota en
el tercer período revitalizó a las anglosajonas, que después de una resistencia
en el primer tramo, llegaron al segundo tiempo técnico con superioridad 16-10,
con la potencia de las espigadas de la frontal.
En el quinto,
Hancok mostró su saque envenenado para adelantar 5-0 a las norteamericanas,
camino a una primera parada 8-2 y Cuba se desinfló, rematada por dos saques
finales de la misma acomodadora.
“Traté de
servir y ganar el partido”, dijo la acomodadora Micha Hancock, quien tuvo nueve
aces para empatar la marca de Nicol Brannagh en la Copa Panamericana del 2002.
Hancock, un
producto de la universidad de Penn State, señaló que jugaron ante un rival de
consideración como Cuba, pero que tuvieron buenas zambullidas en la parte
defensiva que contribuyeron al cerrado triunfo en cinco sets (19-25, 25-20,
18-25, 25-15, 15-7) para extender el invicto a 3-0 en el grupo B.
“Variamos el
ataque después de perder en el primer set y nos mantuvimos alerta en la
defensa”, indicó la jugadora 23 años.
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