SANTO
DOMINGO. Marco Hernández tiene una explicación para la buena manera en la que
ha iniciado a la ofensiva su segunda temporada con los Tigres del Licey.
“Me siento
bien ajustado en el home play, que puedo manejar la pelota bien y estoy
haciéndole swings a buenos pitcheos” dijo el infielder al ser entrevistado por
Roosevelt Comarazamy Jr. para la Antesala Azul.
En los
primeros seis partidos de la campaña, Hernández está bateando para .421, fruto
de ocho hits en 19 veces al bate con tres carreras anotadas y una remolcada.
Tiene un boleto y dos ponches.
“Estoy
tratando de usar todo el terreno, de poner la bola en juego, trabajar con los
conteos y así tomar buenos turnos” agregó el jugador que pertenece a los Medias
Rojas de Boston.
En la estación
2014-2015, Hernández vio acción en 16 partidos y tuvo un promedio de bateo de
.235 (34-8) con seis anotadas, dos dobles, un triple y seis vueltas producidas.
Recibió tres bases por bolas con cuatro ponches y registró un robo de base.
“Con los
lanzamientos rompientes no vas hacia ellos, si no que los reconoces si los
sales a buscar o puedes suponer que te los vas a tirar dependiendo del conteo,
pero principalmente uno sale a esperar la recta”, añadió Hernández.
En el verano
estuvo con dos equipos en las categorías de Doble A y Triple A. En 114
encuentros acabó con average ofensivo de .305 (463-141) con 30 dobles, seis
triples y nueve cuadrangulares. Anotó 57 carreras y remolcó 53. Logró cinco
robos de base.
“Soy un
torpedero natural, aunque en Triple A juegue mucho en la segunda base y un par
de partidos en la tercera base” dice el jugador que llegó a Boston en un cambio
desde los Cachorros de Chicago.
Con relación
al inicio que ha tenido el equipo azul (5-1), el jugador del cuadro agrega que
“hemos jugado bien con la misma armonía, aun luego del juego que perdimos
tratando de hacer las cosas y realizando los ajustes”.
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