El Barcelona se ha proclamado ayer campeón de Liga tras el empate del
Real Madrid ante el Espanyol en Cornellá-El Prat (1-1), lo que ha supuesto
matemáticamente la consecución del 22º título para el conjunto azulgrana, al
que aún le restan cuatro partidos por disputar.
El conjunto de Tito Vilanova, que se mide este domingo al Atlético en el
Vicente Calderón (19.00, C+Liga), mantiene su segunda plaza en el palmarés
histórico de la Liga, por detrás del Real Madrid, que domina la clasificación
general con 32 campeonatos.
En su primera temporada como técnico del Barça, Vilanova ha sumado su
primer título, que se une a los 14 restantes conseguidos durante su etapa como
segundo entrenador culé al lado de Pep Guardiola desde 2008 hasta 2012: 4
Ligas, 2 Copas del Rey, 2 Supercopas de España, 2 Supercopas de Europa, dos
Ligas de Campeones y 2 Mundiales de Clubes.
El Athletic Club ha logrado el sábado la tranquilidad casi definitiva para
lo que resta de temporada liguera, al imponerse hoy por 2-1 en San Mamés a un
Mallorca que jugó más de una hora en inferioridad, acabó con nueve jugadores y
parece que se encamina ya irremediablemente a la Liga Adelante.
Aritz Aduriz, en el minuto 7, y Fernando Llorente, en el 78, lograron los
goles que dejan el camino de la permanencia ya muy trillado para el Athletic; y
el mexicano Giovani dos Santos mantuvo la esperanza mallorquina con un precioso
tanto de falta directa apenas dos minutos después del 2-0 bilbaíno. Aduriz, que
marcó tras un espléndido centro desde la izquierda de Jon Aurtenetxe, incluso
pudo poner más distancia por medio en el marcador, pero falló un penal en el
minuto 23.
A rechace de ese penalti, una mano que supuso la segunda amarilla a Fontás,
a Iker Muniain le anularon un gol.
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